Lo de ser guapo ¿Te ha abierto puertas? ¿Te obliga a mostrar al mundo que eres algo más que una cara bonita? ¿Te da seguridad?
Es una seguridad… de puertas para afuera. Yo he cambiado mucho… Sobre todo, yo era muy tímido. Muy muy muy tímido. Esta entrevista podría haber durado un minuto (risas) porque yo no salía del “sí” o del “no” o el “jajaja”… Al final, esa seguridad no me la ha aportado el hecho de ser guapo, sino el hecho de estar cada vez más seguro de lo que hago, y mucho más seguro de que puedo conseguirlo y mucho más seguro de lo que puedo llegar a hacer… Es confianza en mí mismo desde el interior, interior, interior, ¿Sabes? Porque yo veo a mucha gente que, sí, que tiene un cuerpazo y unos brazos y unos ojos…perfectos, pero luego están vacíos por dentro. No los veo con misma seguridad a la hora de afrontar un proyecto real profesional o personal. Creo que me he ido labrando yo mismo la confianza saliendo poco a poco de mi zona de confort, pasito a pasito, y de eso no te das cuenta hasta que te ves aquí, contigo, por ejemplo, y dices “joder. Puedo”.
Puedes hasta rodar un proyecto internacional y en inglés…
(risas) Ahí tuve la maravillosa suerte de tener una coach excepcional… Me gusta lo del inglés ¿eh? Es… más afilado. Da carácter a lo que estás diciendo. No digo que el castellano no sea suficiente, pero tener la suerte de poder hablar los dos idiomas y con la gente que lo he hecho pues… ¡es una experiencia increíble!
GABARDINA GANT
PANTALÓN MANS CONCEPT
MUAH DIOR BEAUTY
Tus colegas deben de alucinar…
Están muy orgullosos de mí. Mis amigos más cercanos están súper orgullosos y luego, hay gente que te llega y te dice cosas de corazón… Mira, estoy en un punto que valoro mucho a quien me dice cosas malas (risas) porque, que llegue Clark Peters y te diga “has hecho un buen trabajo”, de corazón ¿Sabes? eso son cosas que dices: “jobar, ahora sí, ahora sí que estoy seguro de mí”.
¿Y el miedo a no estar a la altura? ¿O el síndrome del impostor? Tú, de eso, nada, ¿no?
Es que me equivocaré mil veces. Equivocarse no es un error. Equivocarte es parte del “voy a tirar para adelante”. Yo creo que te tienes que equivocar porque si no, si no, ¡vaya rollo! Si todo es perfecto, no aprendes, ¿no?
No sé, dímelo tú.
Nadie es perfecto.
Y ahora, ¿Cuál es el reto que tienes en mente? ¿A qué quieres enfrentarte?
¿Profesional o personalmente?
Ambos
Profesionalmente, me gustaría hacer algo de acción y, personalmente… Mmmm seguir así. Encontrándome a mí mismo. Quiero escucharme.
¿Escuchar qué necesidades tienes? ¿Conectar contigo?
Encontrarme un poco más. Estos años han sido un por “a ver qué cae”, mirando demasiado para afuera… Y este último año, he mirado más hacia adentro. No es egoísmo. Es que quiero saber qué quiero, saber cómo estoy, qué necesito… Creo que me viene bien, obligarme a esto o a lo otro… O, quizás, no obligarme a nada.