Hay una elegancia rebelde que no necesita gritar para hacerse notar. Una silueta alargada, casi etérea, de mirada melancólica y actitud despreocupada. Lleva un vaquero ajustado, una chaqueta perfectamente estructurada, botines afilados y una camiseta que parece haber vivido mil conciertos. Ese es un Hedi Boy, el epítome del cool parisino filtrado por el objetivo y la visión de Hedi Slimane.
Este editorial rinde homenaje a esa figura icónica que Slimane ha esculpido temporada tras temporada desde los tiempos de Dior Homme, pasando por Saint Laurent, hasta su visión actual en CELINE. Más que una tendencia, ser un Hedi Boy es adoptar una actitud: un equilibrio entre la nostalgia del rock’n’roll y la precisión sartorial, entre lo juvenil y lo decadente.
Con esta propuesta visual, reinterpretamos los códigos del Hedi-universo en clave actual. Exploramos siluetas delgadas, paletas monocromáticas, tejidos con textura y esa aura de romanticismo oscuro que nunca pasa de moda. Porque ser un Hedi Boy no es solo una cuestión de estilo: es una declaración de intenciones.
Lo primero es lo primero… ¿Qué es un Hedi Boy?
Un Hedi Boy no se disfraza, simplemente es. Tiene ese algo que no se puede forzar: un rollo despreocupado pero pulido, como si acabara de salir de un concierto en París y se hubiera metido directo a una pasarela. No sigue tendencias, las inspira. Vive entre guitarras, luces bajas y fotos en blanco y negro. Su ropa habla de noches largas, arte, juventud eterna y una rebeldía con estilo. Ser un Hedi Boy no va de parecerte a nadie, sino de entender que menos es más… y que la actitud lo es todo.
¿Preparado? Aquí tienes muchas y muy buenas ideas para llevar tus looks de la próxima temporada al más puro estilo Hedi Boy
Este look no viene a pedir permiso, viene a quedarse con toda la atención. La camisa de leopardo de ASPESI es puro descaro elegante: abierta hasta el pecho, con esa vibra de “anoche salí y aún no he vuelto”. El traje de Valentino equilibra la balanza con una silueta afilada y sobria que dice sí, soy un salvaje… pero con clase. Y las gafas CARRERA rematan la jugada con ese punto estrella de los 70: misterio, ego y una dosis de “ni me mires si no tienes algo interesante que decir”. Este no es un look, es una declaración de principios. Es rock, es moda, es don’t care, do stare.
Smoking VALENTINO
Camisa ASPESI
Gafas CARRERA

Modelo Luis Brownie
Fotos Manu Bermúdez
Grooming Lucas Margarit
Estilismo Enol Blasco
Asistente estilismo Jorge Clemente



Este look es puro atrevimiento con clase. Onitsuka Tiger lo firma y se nota: mezcla de sofisticación ninja con guiños de club underground. Chaleco estructurado, top entallado con encaje asomando (porque sí, porque puede) y shorts con rollo old-school que dejan las piernas listas para robar miradas. Todo en negro, claro, porque el misterio siempre viste de oscuro. Las Ray-Ban lo rematan con esa energía de me da igual todo pero lo hago con estilo. Es andrógino, provocador y libre. El típico look que no se lleva… se defiende.
Total look
ONITSUKA TIGER
Gafas Ray-Ban


