Recogemos en este post la guia (definitiva) con todas las claves para hacerse un traje a medida y no morir en el intento.
Llega un momento en la vida de todo hombre en el que el traje se convierte en un cooperador necesario. A veces, sirve cualquier opción pero, por lo general, la etiqueta de las situaciones que obligan a vestir traje (véase bodas, bautizos o entrevistas de trabajo) requieren que estemos impolutos y, para ello, hacerse un traje a medida se plantea como la mejor alternativa. En este post, te desvelamos todo lo que tienes que tener en cuenta para acertar con la elección de tus prendas made-to-measure.
Dónde hacerse un traje a medida.
La sastrería es el lugar por el que uno debe dejarse caer para atinar con un look de proporciones exactas. El gremio de artesanos que en nuestro país se dedica a este tradicional oficio es innumerable aunque pocos pueden presumir del saber hacer de los que recogemos en esta selección:
Madrid
La capital española esconde entre sus calles una infinidad de sastres especializados en el buen vestir del hombre. Por ejemplo, si quieres sentirte como un rey, deberías empezar a vestirte como uno de ellos, algo relativamente fácil si se tiene en cuenta que la sastrería Lopez Herbón es una de las preferidas del emérito, un enclave único para hacerse con un traje a medida, en C/ Conde De Aranda, 8 1-Dcha. Otra opción, conocida por los hombres más sibaritas de la ciudad es la Sastrería de Manuel Calvo de Mora, ubicada en la calle Ayala de Madrid, un templo de la estética clásica que atesora el saber hacer de varias generaciones de expertos en la materia. Tampoco puede faltar en una lista que pretenda recoger a los mejores sastres de Madrid el nombre de la Sastrería Langa, situada en Calle Félix Boix, nº 5, su filosofía es clave para entender su concepto: escuchar las necesidades de cada hombre para desarrollar prendas que estén alineadas con su estilo de vida.
Barcelona
La ciudad condal posee un templo de la moda en el que la sastrería también tiene su hueco, se trata de Santa Eulalia, el paraíso del lujo más apetecible en el que la jet set barcelonesa adquiere los últimos diseños de firmas como Carven, Avellaneda o Helmut Lang. Además de su repertorio de prendas de alta moda, este oasis ubicado en Passeig de Gracia cuenta con una exquisita sección en la que los hombres más exigentes pueden confeccionar sus prendas a medida.
Para hacerse un traje a medida es necesario acudir a las mejores sastrerías como Santa Eulalia, en la imágen.
Valencia
Al mando de la mejor sastrería valenciana, situada en la calle Don Juan de Austria 36, se encuentra Antonio Puebla, un elegante sastre al que dicen que Dalí llamaba ‘Divino Puebla’. Su trabajo ha acompañado durante décadas a la burguesía valenciana, de hecho sus creaciones eran (y son) las que elegían los políticos, empresarios y otros personajes en aquellos años dorados de la vida social valenciana en los que los mejores barcos de la América’s Cup izaban sus banderas en la costa mediterránea y los coches más espectaculares aparcaban en doble fila en las calles de la ciudad levantina.
Sevilla
Por poco que gusten los generalismos está claro que los sevillanos hacen bandera del buen vestir, de hecho, los que mejor conocen la ruta de shopping de la capital hispalense acuden a la Sastrería Lista, un punto de referencia para las compras y alquileres de los fracs, trajes y chaqués más sofisticados.
Más allá de estas cuatro ciudades, la selección de lugares en los que uno puede hacerse un traje a medida es extensa. Existe la opción, más accesible, de apostar por el servicio de tailoring con el que muchas de las tiendas de gran consumo han complementado su repertorio de prendas de prêt-à-porter. Los mejores ejemplos los encontramos en marcas como Massimo Dutti que han desarrollado una cuidada propuesta de piezas a medida. Lógicamente, la calidad no es la misma que la que ofrece el selecto grupo de sastres artesanos que te proponemos, sin embargo, estas grandes cadenas sirven perfectamente al objetivo de ayudarnos a estar intachables con trajes que se adapten a nuestro fit.
Cuánto cuesta hacerse un traje a medida
Existe un umbral psicológico que en muchas ocasiones nos impide cruzar la puerta del taller de un sastre por la duda de hasta cuánto puede costar hacerse un traje a medida. El dilema tiene fácil solución, el precio lo marca, generalmente, el tejido. Hablando de cifras más exactas, una buena combinación de pantalón y chaqueta podría costar una media de 850 euros y esa cifra podría subir hasta donde la imaginación de uno quiera llegar. Para buscar opciones más económicas la alternativa se encuentra en los servicios de productos a medidas de firmas como Massimo Dutti en el que el precio del traje completo oscila entre los 375 y los 500 euros, en función del diseño.
Incluso Steve McQueen tenía que hacer frente a ocasiones en las que necesitaba hacerse un traje a medida.
En qué fijarse al hacerse un traje a medida
Hay una serie de consejos a la hora de hacerse un traje a medida que no deberías perder de vista para maximizar tu experiencia y aumentar el rendimiento de tu compra. Por ejemplo, no es recomendable dejarse influenciar excesivamente por el auge de las tendencias, más bien, lo conveniente sería apostar por una prenda de silueta clásica que pueda permanecer actualizada en tu armario durante décadas. Lo mismo podríamos decir del color, lo idóneo sería buscar tonos neutros y todoterreno como, por ejemplo, el azul índigo que nunca falla. Aún así, hay que hacer equilibrios y no conformarse con el diseño más evidente ¿cómo lograrlo? buscando guiños en las prendas que no se encuentren en los canales de distribución tradicionales, para así, conseguir ese extra de exclusividad que sólo puede ofrecerte el servicio a medida.
Hacerse un traje a medida online
En los últimos tiempos, un nuevo modelo de negocio en auge es el de las webs que permiten hacerse vía online prendas a medida. Plataformas, como por ejemplo Hockerty, iTailor o Blackpier, te permiten diseñar tu traje y configurar todos sus extremos, desde la tela que más te encaja, hasta el número de ojales que quieras que lleven tus piezas, pasando por otros detalles como el fit, más o menos ajustado o la silueta de la chaqueta (¿cruzada o sin cruzar?) para configurar un producto prácticamente único.
La artesanía es un valor al alza a la hora de hacerse un traje a medida.
El riesgo de la alternativa digital para hacerse un traje a medida lo encontramos fundamentalmente en la propia toma de medidas. No es lo mismo que quien te mida sea un experto en la costura con un conocimiento global de las proporciones del cuerpo, a que tengas que ser tú mismo el que introduzca tu contorno, altura y volúmenes dentro de una plataforma. En todo caso, también es verdad que estas webs ofrecen una serie de indicaciones bastante precisas para que quien te tome medidas lo haga con un cuidado extremo y que el resultado sea impecable.
La camisa un must!
Para lucir impoluto, no basta con un traje correcto, también es fundamental que la camisa esté ajustada a tu cuerpo. Además, el precio de esta prenda no es nada inaccesible, en cualquier web, una camisa a medida ronda los 60 euros y en las sastrerías el coste de la pieza está alrededor de los 150 euros. Más económica es la opción de las tiendas de siempre, donde también se encuentran diseños de lo más apetecibles como esta camisa de Mango que cuesta sólo 39,99 euros.
Camisa de MANGO MAN. ¡Haz click en la imágen para comprarla!
La diferencia está en los detalles
Todos los accesorios que elijas pueden elevar o demoler tu look. Por eso, aquí te desvelamos las claves para saber escoger entre unos tirantes o un cinturón, seleccionar los gemelos más apropiados, saber distinguir cuándo conviene llevar corbata o pajarita y, sobre todo, no fallar con los zapatos.
¿Tirantes o cinturón? Sin duda, los tirantes han ganado al cinturón en la batalla de la elegancia. De hecho, en las últimas temporadas han vuelto con más fuerza que nunca y el interés por esta pieza ha incrementado de manera exponencial. Lo que tienes que saber es que nunca se llevan conjuntamente y que lo más apropiado es decantarse por un sencillo diseño de elegancia sofisticada como este que te proponemos, también de MANGO MAN.
¡Vaya gemelos! Son una de esas tradiciones que no deberíamos perder, los gemelos, se convierten en un detalle diferenciador capaz de señalar la elegancia de un hombre. Las opciones en piedras, diseños y materiales son innumerables desde los 14,95 euros de algunos modelos de acero o bañados en plata, hasta las alternativas con diamantes de precios prohibitivos. En todo caso, huye de los diseños ‘divertidos’ con detalles futbolísticos o costumbristas.
Con el nudo al cuello. El eterno dilema de la elegancia clásica se basa en si uno debe optar por una corbata o por una pajarita para complementar su look y la verdad es que la pregunta no tiene una única respuesta válida. Para no fallar, te aconsejamos que limites la pajarita al uso de smoking en situaciones especialmente de noche (siempre con la camisa específica para este tipo de accesorios) y, por su parte, que te decantes por la corbata para todo el resto de situaciones como, por ejemplo, una boda de mañana o una reunión de trabajo.
Vestirse por los pies. A la hora de configurar un look muchos hombres se olvidan de escoger con detenimiento uno de los complementos más imprescindibles: los zapatos. Si lo eliges bien probablemente no llamen la atención de nadie, sin embargo, si no haces la elección correcta puedes destrozar tu traje o esmoquin. Aunque las alternativas son numerosas hay un zapato que encaja con cualquier traje, se trata específicamente del zapato básico de pala lisa con cordones y costura prusiana ¿Que no sabes a qué nos referimos? Aquí te dejamos la prueba visual.
