En casa tenéis un referente de algo completamente distinto a lo que hacéis vosotros. Cuando le ponéis un tema vuestro ¿Qué os dice?
Le encanta. Uno le gusta más que otro obviamente, La grosera no tanto por el lenguaje (risas)…
Niño habla bien (risas) ¿no?
Así mismo (risas). Pero hay un respeto y admiración muy bonito. Tener a un artista como Ricardo Montaner en casa dándote su opinión es muy grande, aprendimos mucho de él y es bonito ver como nos deja ser los artistas que somos, tan distintos a él.
A parte de componer para vosotros sois responsables de los mayores éxitos de los últimos años. Por ejemplo «Vente Pa’ca» de Ricky Martin y Maluma o «Sin pijama» de Becky G. ¿Cómo surgió?
Llevamos dieciséis años en esto, desde muy pequeños. Y llegó un momento de frustración porque no sucedía nada en nuestra carrera artística y decidimos escribir temas para otros, además de lo nuestro, para tener con qué vivir. También era la oportunidad de conocer a más gente. Funcionó con Thalia o con Vente Pa’ca de Ricky Martin y Maluma y eso hizo que la industria nos viera de otra manera. Nos empezó a ver como algo más que los hijos de Ricardo Montaner. Y llegó Mi Mala, que fue la canción que nos cambió la vida. Todo eso junto creó una pelota y la gente nos empezó a ver como compositores relevantes. Hemos tenido una carrera en paralelo como compositores que nos ha permitido hacer amistades hermosísimas.
Supongo que llegar a ellos no sería fácil
Cuando metes una canción exitosa ya te empiezan a buscar pero los primeros acercamientos fueron a través de la discográfica.
Me decíais que empezáis a componer para otros porque vuestra carrera no os estaba permitiendo vivir de la música. Y ver que tus canciones son éxitos en otros tiene que tener una mezcla de alegría y rabia ¿O me equivoco?
Era un poquito más allá, la rabia viene porque la discográfica quería que grabáramos temas compuestos por otros pero teníamos una canción en el número uno en ese momento. No entendíamos que había en nosotros que no terminaba de conectar. Y se trataba de encontrar nuestra identidad. No era culpa de la discográfica, era nuestra. Todo éxito tiene su tiempo de gestación, unos toman más tiempo que otros. Nos tocó vivirlo de otra manera.
Y la verdad es que escribir para otros artistas nos ayudó a tener perspectiva y ver quiénes éramos nosotros.
Y también os daba pistas de lo que funcionaba y lo que no
Claro, por supuesto. A partir de ahí pudimos empezar a vivir de esto.
Yo antes de esto grababa la batería para otros artistas. Para poder sacar a la novia a cenar por ahí (risas).
Ahora, mirando hacia atrás, tiene que ser satisfactorio recordarlo.
Uno tiene que tener esa pausa para agradecer y darse cuenta de lo que ha pasado. Hemos crecido y hemos tenido la oportunidad de hacer cosas hermosísimas.
¿Hay un momento que recordéis especialmente y que marque un cambio positivo en vuestra carrera?
Si, en Perú. Recuerdo que estábamos allí, ya había salido Mi mala, y en España hicieron unos festivales en los que Karol G actuaba y cantaba ese tema entre otros. Y la gente nos decía que era uno de los temas que la gente más cantaba. Estábamos agradecidos pero no terminábamos de tomarlo en serio. Y un día, allí en Perú, Abraham Mateo nos invitó a tocar esa canción y ahí lo comprobamos. Después de doce años de trabajo ese fue el momento.
Habéis hecho muchas colaboraciones ¿Hay algún artista español con el que os apetezca hacer algo?
Mucha gente. Rosalía me encantaría.
Es lo máximo. De hecho quería deciros que he escuchado varios temas de Refresh y he de deciros que los veo muy fácilmente «aflamencables». No sé si me explico (risas).
Pues te lo agradezco mucho, creo que tiene mucho que ver con los músicos que admiro. Tiene ese dejadito como flamenco porque la música española ha sido clave para nosotros en muchos sentidos. En la manera de interpretar, de escribir… Alejandro Sanz siempre ha sido de nuestros compositores preferidos y tenemos muchas cosas de él en las métricas por ejemplo. Con él nos encantaría hacer algo y de hecho es amigo cercano, lo queremos mucho.
Vamos a hablar del vídeo. La estética es muy power. Estáis muy en el mood fashion.
Qué bueno. Todo lo hicimos con Stillz. Hasta las tantas de la mañana dando ideas y desarrollando el concepto. Y la verdad es que hicimos tremendo equipo. Ejecutó todo mucho mejor que como lo teníamos en la mente. Ouch es el vídeo más grande que hemos hecho hasta ahora.
Esos planos cenitales molan mucho.
Queríamos hacer cosas dolorosas, mostrando dolor. Y a él se le ocurrió el tipo de tomas cenitales,… Es un tipo muy creativo y visionario.
¿Cómo os lleváis con la moda? ¿Os interesa o es más postureo?
Nos interesa a full. Nos flipa. Estamos en un momento en el que entendemos quiénes somos y eso también se nota en la ropa. Hoy en día nos vemos como queríamos ser desde pequeños.
El género urbano ha marcado mucha tendencia. En moda masculina, de hecho, creo que ha ayudado a romper tabúes como los estampados arriesgados, las uñas pintadas, … Por lo menos en Europa no es tan fácil ver esos looks en hombres. Y es super interesante.
Es importante romper estereotipos culturales. Veo que a veces la gente me critica por pintarme las uñas, y me da igual. Hay que hacer lo que uno sienta sin tener nada más en cuenta.
¿Qué planes tenéis a partir de ahora?
Sacar el disco, esperar que la gente lo reciba bien, hacer la promo como podamos… Tenemos muchas ganas de ir a España pero por el momento no será posible. Y trabajar en el disco que vendrá.
Pues un placer, hablaremos pronto seguro y mucho éxito con Refresh.
Muchas gracias y, claro, hablamos pronto de nuevo.
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