Al salir de O.T sorprendió el tipo de música con el que te presentaste.

Bueno, noté que al salir de la academia todavía no había mostrado nada personal. En ningún momento pensé en lo que la gente esperaba de mí, me habría vuelto loca (risas). Tenía en la cabeza la música que quería hacer y eso estoy haciendo. Lógicamente vas evolucionando y ahora escucho el primer disco y hay cosas que hubiera hecho de forma diferente, pero siempre he sido fiel a lo que me ha nacido en cada momento. He sido consecuente.

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A día de hoy sigo sin entender muy bien que ha ocurrido (risas). Sales y hay muchísima gente que te avasalla a comentarios, que parece que te conoce… es muy extraño.

Ahora mismo se habla mucho de estrategias de marketing y productos musicales super definidos en despachos ¿Lo has vivido?

Trabajo con un equipo pero hay que tener en cuenta que, al salir de O.T, todavía no eres un artista. Es decir, es un camino que tienes que hacer con ideas propias pero necesitas ayuda. A día de hoy no creo que haya ese momento de coger un artista y crear un producto diciéndole lo que tiene que hacer. En mi edición era todo más kamikaze. Todo depende del producto que tengas en mente, como lo quieras comunicar… Depende de tí.

En este segundo trabajo estoy muy contenta porque todas las ideas, desde las visuales a la comunicación a los seguidores, son mias. Y me queda mucho por aprender. Tengo un equipo que me escucha y confía en mí y voy aprendiendo poco a poco. Desde cómo ordenar las ideas hasta saber qué papel tiene cada uno dentro de la discográfica. A quién tienes que comunicar el qué…

Eres una becaria de la música

Totalmente (risas) Soy una becaria de la música. Un poco así.

¿Dónde estás más cómoda? ¿Con un tema como «Nana triste» o con una producción como «Algo duele más»?

Bueno, yo me siento yo misma en todo lo que hago. Soy bastante flexible en ese sentido. Ahora mismo me siento más cerca de «Algo duele más». «Nana triste» es la primera canción que compuse. Es una canción super pura y desnuda. Y seguiré sacando canciones de este estilo, pero me siento más cerca de lo que ido haciendo después.

En el directo los temas con más producción serán más difíciles de presentar.

Totalmente, son difíciles. Por eso hasta ahora no me he atrevido a hacer una gira. Bueno, y porque tampoco tenía material para llenar una hora y media de show. Al final mis canciones están muy hechas para la escucha en Spotify. Para apreciar la producción, las capas de sonido, la voz susurrada,… Al final piensas en el directo y lo que pide, al menos para mí, es ver la música viva. No sacar una pista y cantar por encima. Ha sido difícil de adaptar por eso. Las bases tienen mucha importancia pero quería que en el directo se vea un espectáculo trabajado y con música en directo. El trabajo ha sido gordo pero estoy muy contenta. Al final la gente que vaya al directo va a ver algo diferente a lo que se escucha en plataformas, que es lo que quería.

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