Entrar en un personaje así tiene que ser complicado, pero salir de él tampoco debe ser fácil.
Me gustaría dejar claro que yo me lo paso súper bien haciendo esto. Es un sufrimiento placentero. Por eso supongo que tiene que ver que, en general, estoy muy bien de la cabeza, hay mucha terapia. Yo me enfrento a mis caminos, a mis miedos y a mis pulsos regularmente. Entonces, bueno, estoy bien de la cabeza y para mí es un juego pseudo terapéutico, no es desagradable. De hecho, hasta me gusta. Supongo que hay algo meditativo en ello. Y es que cuando vives emociones muy fuertes que tú ficcionas y sobre las que tienes un cierto control, vives un presente que no es estrictamente el tuyo. No sé cómo explicarlo, pero para mí es meditativo. Estás viviendo una cosa, pero tienes perfectamente claro que no te estás volviendo loco, que no está ocurriendo, pero te estás concentrado muchísimo en otra cosa que no eres tú. Y eso es casi meditativo, porque estás muy presente fuera de tus pensamientos. Pero cada cual tiene su método, otro a lo mejor encontrará una manera más rápida y menos costosa de llegar a resultados maravillosos.
ABRIGO LOEWE
JERSEY UNIQLO
PANTALÓN LOEWE
Está claro que funciona porque revisando tu currículo salieron 54 títulos. Se dice pronto. Y forman parte de una carrera que comenzó a los 12 años.
Sí, con una pausa de cuatro entre los 14 y los 18, que yo paré voluntariamente.
¿Tenías claro lo de la actuación ya con 12 años?
No, no, para nada. Para mí entonces era un juego. Me divertía ponerme delante de los demás y hacer cosas. Creo que intuitivamente había algo de lo mismo, de esta idea de dejarte llevar. A los 12 yo ya pensaba mucho, y a lo mejor, sin tener ni puñetera idea de lo que iba la meditación, pues había algo que me hacía parar de mi propio universo y estar presente en otro. No sé si era algo tan místico, pero por aquel entonces era un juego y me divertía mucho.