Es quizá una de las cocinas más internacionales y que mejor ha sabido expandirse por el mundo, pero en la gastronomía, como en otros sectores también existen las modas. Por eso, durante los últimos años los ojos de los cocineros parecían estar puestos en oriente. Sin embargo, vivimos un resurgir de la cocina de nuestros vecinos mediterráneos. Así lo atestigua la apertura de restaurantes italianos en las grandes ciudades de nuestro país, que buscan dar respuesta a la demanda de aquellos que se pirran por la pasta y la pizza, pero que quieren ir más allá.

Aprovechamos este despertar de los paladares patrios para darnos una vuelta por restaurantes italianos que merecen una visita. ¿Quieres acompañarnos?

Algunos cocineros italianos, como el gran Andrea Tumbarello, llevan años proclamando las bondades de una cocina a la que, en muchas ocasiones, hemos maltratado. Y además, sin piedad, haciendo pizzas en las que cualquier parecido con la realidad era pura coincidencia y en los que hasta se le agregaba nata a la carbonara. Los chefs de estos restaurantes italianos están empeñados en demostrar que la calidad de los productos es la base de su cocina y que a veces basta con agregar dos ingredientes para lograr un sabor inigualable. Estos son algunos de los que hemos encontrado.

Gioia, la tratottia escondida que triunfa entre los restaurantes italianos de Madrid

El boca a boca ha sido la mejor ayuda para este restaurante de la calle san Bartolomé, en el madrileño barrio de Chueca. El que lo prueba repite y además, lo suele recomendar. De ahí que la guía Repsol también haya decidido darle uno de sus soles a  Davide Bonato, que es quien ha creado un concepto que está triunfando por la calidad de sus productos y por su toque viajero. De hecho, la trufa, de la que este chef italiano sabe como pocos en nuestro país, está presente en muchas de sus propuestas como su infalible pasta caccio nerone. Pero deja espacio para otros platos igual de suculentos, como el bacalao negro de Alaska, con el que hacen un auténtico viaje por el mundo. En Gioa destaca sus pastas y platos como su vitel toné revisitado pero son imprescindibles, sus postres.  

Don Giovanni, el clásico entre los clásicos

Andrea Tumbarello no necesita presentación, ni entre los amantes de los restaurantes italianos ni entre el público general. Es quizá el chef italiano más conocido en nuestro país y lleva años manteniendo su propuesta en Madrid y también aterrizó con ella en Barcelona hace un tiempo. Incluso uno de sus alumnos aventajados le acompaña desde hace un tiempo en una filial en la finca Cortesín (Málaga). Economista de formación, el amor fue el culpable de que Tumbarello acabara en nuestro país, y la casualidad, fue la que hizo que se quedara con el restaurante Don Giovanni hace ya casi dos décadas y dejara el despacho en el que trabajaba en Milán. Es todo un clásico, y entre sus platos hay que probar sus platos con huevo y la pasta fresca en cualquiera de sus versiones.

Gallo Nero, de Barcelona a Italia en tres pasos

La suya es una cocina italiana sin pretensiones, pero como en todo establecimiento culinario, el sabor es la base de su propuesta. Inspirado en la cocina de la Toscana, en Gallo Nero triunfan con sus schiacciata. Este es un plato tradicional propio de esa región italiana que consiste en un pan de forma redondeada y plana parecido a la focaccia. En Gallo Nero lo rellenan con burrata y embutidos italianos varios como salami, bresaola o, como no, mortadella. Una forma de disfrutarlo que no puede ser más parecida a la forma en la que lo hacen los italianos y que por su versatilidad, está triunfando en la Ciudad Condal. Tienen dos locales en Barcelona en los que los vinos italianos también están muy presentes y donde tampoco faltan los spritz. Para disfrutar del aperitivo.

Pante, esencia siciliana con una decoración inigualable

Este restaurante, ubicado en pleno barrio de Salamanca de Madrid es una auténtica isla para quienes quieran dar un paso más allá en la cocina italiana. Auténtico, centrado especialmente en la calidad y las opciones de la cocina regional siciliana, es el proyecto de Alessandro Luchetti, Daniel Cabezas y Antonio Facco, que querían traer la arquitectura y el concepto de la isla de Pantelleria a Madrid, algo que no existía entre los restaurantes italianos. De hecho, Facco ha sido el encargado de la decoración, puesto que es diseñador, y se ha encargado de detalles como la barra, que está compuesta por baldosines fabricados por artesanos de la isla que da nombre al establecimiento. En la cocina, como buenos sicilianos, dominan la Caponata como nadie pero son destacables sus carpaccios, especialmente el de gambas rosas, que subliman con un toque de sal maldon y calabacín al jengibre. No faltan por supuesto las pastas y los postres tradicionales todo hecho con productos traídos directamente de Pantelleria. Y entre ellos, cómo no, algunos de los vinos.  

Villa Capri, el nuevo sitio instagrameable entre los restaurantes italianos

El grupo Big Mamma, con restaurantes en París, Mónaco o Londres aterrizó en España con Bel Mondo hace un tiempo y se convirtió en el restaurante más presente en Instagram. Con un espíritu un poco más tradicional, aunque con una propuesta estética igual de fotografiable, abrieron poco después Villa Capri, en la zona de Alonso Martínez. Un lugar al que llevar a los amantes de los restaurantes italianos y a esos foodies que quieren fotografíar los platos antes de llevárselos a la boca. Su carbonara es de las más solicitadas por aquello de que la ponen dentro de la rueda del parmesano. Sus pizzas son una buena opción para tomar y compartir.

¿Quieres más propuestas de restaurantes y gastronomía? ¡Visita aquí nuestra sección más glotona y disfrutona!