¿No serás el típico que va a una prueba con un amigo para acompañarle y le cojen sin presentarse?
Exacto, eso pasó. Sergio. Nos conocimos trabajando como modelos. De alguna manera siempre había estado latente ahí pero yo trataba de negarlo. Y surgió todo de esta manera tan casual. Conseguí un contrato con TV Globo y descubrí que eso era lo que quería hacer. Tenía necesidad de expresarme como actor pero no era consciente.
En el momento en el que llegas a EEUU hay un auge del hombre latino sexualizado. Algo que hasta ese momento no se había visto. De hecho hiciste un cortometraje para CHANEL con Nicole Kidman en el que eres el guaperas latino de la historia.
Ese trabajo fue un sueño.
¿Has sido consciente de que el físico te ha ayudado en tu carrera?
Sí, claro.
¿Y lo has utilizado a tu favor? ¿es algo contra lo que haya “luchado”?… ¿Cómo lo has gestionado?
A veces va en contra y otras a favor. Es lo que es, no lo niego.
Hay muchos actores que luchan contra ello, que no quieren encasillarse en el guapo.
Los entiendo. Pero al final lo importante, mas allá de tu imagen, es que sepas actuar. Nunca he huido de ello. Mi foco está siempre en el personaje que voy a hacer. No tengo en cuenta la estética, es un tema, el meterme en la piel de otras personas. Hice el personaje de una mujer transexual, por ejemplo, y eso te cambia la manera de entender el mundo. Ya no solo a nivel artístico, como ser humano. Te rompe prejuicios, te ayuda a abrir y ampliar tu mente. Desde ahí miro la interpretación. No tengo en cuenta el tema del físico y no es algo que tenga en cuenta al escoger un papel.
¿A nivel espiritual eres curioso?
Mucho. En Brasil la religión está muy presente, y no solo la católica. Yo no soy religioso pero me importa mucho trabajar el espíritu. Practico yoga, meditación… Y no es nada místico. El yoga me ha cambiado la vida. No solo a nivel mental, también postural. Ha sido una ayuda tremenda como actor. También para estar aquí y ahora, algo muy importante como actor.
Gabardina GANT
Chaleco Sandro
Pantalón POLO CLUB
Zapatos Martinelli
¿Con la fama como te llevas?
No lo he buscado, no estaba planeado. Cuando me llegó fue muy difícil de gestionar. No había internet, había paparazzis. Te seguían por la calle y era difícil hacer vida normal en Brasil. Hablé con gente, empecé a entender y trabajarlo y poco a poco fui lidiando con todo entendiéndolo como parte del trabajo. Mi familia me ha ayudado mucho con eso. Mi hija, tiene cinco años, y nadie la conoce. Nunca he expuesto mi vida personal y ellos me han ayudado a hacerlo. Vivo como una persona normal.
¿Cuáles son tus aficiones?
Surf es mi deporte número uno, lo practico mucho.
¿En la moda tienes interés?
Lo veo como un arte, no como tendencia. Me gustan muchos diseñadores pero, por decirte uno brasileño, Ricardo Almeida me encanta. Es un diseñador con el que he empezado una colaboración y me siento muy cómodo con lo que me hace. Ya he trabajado para Dolce &Gabbana, Valentino, Gucci,…
¿Y si tuvieras que definir tu estilo?
Tengo que estar cómodo. Eso es lo primero. Si estoy en Brasil, hace calor, bermudas y chanclas. O mejor, descalzo. Crecí en una hacienda en el bosque con animales. Me encanta estar sin zapatos. Amo la naturaleza, cerca de ella me siento cerca de mi centro. El agua salada me relaja. Algo que me gusta mucho del surf, como hay corrientes, tienes que estar centrado en ese momento.
Como el yoga.
Exacto. Es muy espiritual. Es lo que necesito para desconectar. Mañana no, pero pasado mañana estoy en el mar.